miércoles, 30 de abril de 2008

-Me lo volvio a decir.-le digo mientras él prende la tele para ver la temperatura.
-La vieja? Pah no le des pelota.-me dice sin mirarme.
-Si pero me pudre. A vos no te dijo nada?-le digo yo mientras me pongo las botas.
-Si, me agarro un par de veces, pero ya te dije, ni pelota.-dice el.
-En cualquier momento le contesto alguna de las mias.
El se da vuelta sonriendo.
-Te vas a ganar otra suspension.
-Cuantos grados hacen?-le digo cambiandome la ropa.
-10. Hace frio, el pulover negro que uso abajo del guardapolvos esta aca no?
-En el placard.-le digo yo alcanzandoselo.
-Lo mande a lavar el otro dia.
El lo agarra y me mira.
-Estas enojada.
-No, no estoy enojada.-le digo yo buscando las camperas.
-Te conozco.-me dice.-cuando estas enojada se te ponen rojas las mejillas.
Yo me rio y lo miro.
-Es esa vieja.-le digo dejando los abrigos y abrzandolo.
-Dale Sofi, no te vas a poner mal por eso! Hace cuanto estamos juntos ya? Cinco años y mira si la vamos a escuchar ahora.-me dice acariciandome el pelo.
-Si ya se.-le digo yo.-Ya fue, ya se me va a pasar.Bajamos en el ascensor y vamos juntos en el auto a la clinica. Siempre me bajo una cuadra antes asi no pasamos por el estacionamiento.
Aunque insisto que lo nuestro practicamente no tiene nada de secreto.
Cuando me estoy por bajar, me da un beso y me dice:
-Ah sobre la suspension...trata de que sea Viernes.
Le sonrio y se va. Cuando llego a la clinica, veo a Yoda avanzar hacia mi. Pero hoy es miercoles.

jueves, 24 de abril de 2008

Good Morning.

Ya conocen a Laura, la chusma. Laura tiene 27 años y una hija de 5 que la maneja como un títere. Lo que la nena quiere, ella se lo da, y si no puede, la criatura arma un berrinche que hace temblar la tierra. Ella es recepcionista conmigo.
Después esta la jefa de cirujanos, a la que "cariñosamente" apodamos Yoda, ya que tranquilamente podria ser su versión femenina. Yoda es una señora de alrededor de 160 años de edad, mas arrugada que un dinosaurio (?) y tan malvada como un tiranosaurio Rex. Cuando viene un grupito de residentes asustados y ella es la encargada, arde troya. Una vez hizo llorar a un chico que salió corriendo de un quirófano donde tenían clases, se tomó el ascensor y no lo vi más.
Bueno, ademas de Yoda, los cirujanos tratantes son Andrés, Marcos, Luis, Estela y Genesis. (No les miento, la doctora se llama Genesis y su apellido es Yirula) Ah y no nos olvidemos de Nip/ Tuck: Joaquin y Laureano. Especialistas en cirujia estetica. Mas gays quePeña y Piazza juntos.
Se preguntaran, como hacen muchos por aca, con cual de los doctores me estoy acostando.
Veran, cuando entre a trabajar aca, el primer dia confundi unos papelerios de pacientes y fue algo asi como haber dejado caer al agua el Santo Grial. Una historia medica, jamas de los jamases puede perderse o confudirse. Bueno, yo la perdi. Y Marcos la encontro. Y Marcos me la dio en secreto para que nadie se enterara. Y Marcos me beso en el ascensor esa noche.
Bueno, despues de los cirujanos estan las enfermeras, que aca son 5: Rosa, Maria, Juana, Lucia y Natalia. Mas tarde les contare sobre ellas.
Y bueno, por ultimo los residentes. El grupito que parece estar condenado a muerte cuando salen del ascensor con cara de espanto. No es que les espante operar, despues de todo eso es lo que ellos eligieron. Los espanta Yoda. La misma Yoda que me agarro mi tercer dia de trabajo y me dijo que las relaciones entre empleados no estaban permitidas, que los ascensores tenian camaras y que los medicos no pueden distraerse entre otras prohibiciones.
"Los peinados de la decada del 40 tampoco deberian estar permitidos"-le dije yo.
Esa fue mi primera suspension. La primera de 18.

Lo bueno de las suspensiones, es escuchar el timbre a las 9 de la noche, y encontrar un ambo celeste tirado en el piso de mi departamento a las 7 de la mañana del otro dia.

martes, 22 de abril de 2008

Buenos Días.

Termino de atender a la señora que esperaba que la preparen para una cirujia de varices y el ascensor se abre.
-El doctor la va a atender enseguida.-le digo sin mirarla, con los ojos en el ser de ambo celeste que acaba de salir del ascensor, con un bolso negro en el hombro y sonriendole a cuanta enfermera se cruce.
-Andan diciendo alla abajo que te acostaste con él.-me dice mi compñaera Laura.
Laura, Laura, Laura...si le dieran a elegir entre un chisme y el oxigeno, creo que se lo que elegiria. -Quien lo dice?-le digo yo ordenando formularios.
-Todos. No se quien te vio en su auto anoche cuando se iban.-me dice ella en un susurro.
-Es mentira. Anoche tuve examen en la facu y me fui lo mas rapido que pude.
Laura me mira apretando los labios como hace cuando sabe que no puede sacarle mas informacion a una persona.
Y entonces, él se acerca a mi, me sonrie y me pide las historias de los pacientes. Se las doy y se va. Asi somos aca. Dos extraños. La recepcionista y el cirujano. Nada mas.


Pero me pregunto quien nos habra visto en el estacionamiento.